de esas redes delictivas. Incluso, muchos han recurrido a profesionales de la conducta humana, tal como dijo la psicóloga Josefina Martínez Medina, que advierte que cada día esas extorsiones afectan a ciudadanos de todos los estratos sociales.
Los estafados
Entre los afectados se encuentran empresarios, profesionales diversos, mujeres casadas, incluso religiosos, de acuerdo a informes de la Policía y del Ministerio Público.
Las denuncias de chantajes y extorsiones por las redes sociales son crecientes, que los oficiales y fiscales especializados en perseguir los delitos de alta tecnología y cibernéticos cuando reciben denuncias de personas afectadas por la problemática, saben de antemano por dónde anda el asunto.
“Diga cuál es su problema, pero sabemos por dónde anda todo, porque casi todos los chantajes y extorsiones que se dan por redes sociales tienen las mismas características”, les dice el personal especializado a las personas víctimas de esas acciones cibernéticas.
La Policía en Santiago dice que ha apresado en flagrantes delitos a personas que se dedican a esos actos ilícitos por redes sociales.
Dijo que en esos casos, les recomiendan a las víctimas que les digan a los y extorsionadoras que les digan que les van a enviar el dinero por una determinada agencia de envío de valores, la hora a que lo van a buscar y a nombre de quién lo pueden enviar.
Entonces, en ese caso, de acuerdo a la entidad, oficiales policiales junto a la persona afectada montan una vigilancia especial en el lugar, logrando apresar a muchos de ellos, aunque otros logran escapar, pero sin llevar el dinero que es colocado como “trampa”.
La Policía Nacional en Santiago llamó a las personas que usan redes sociales para que tomen medidas cautelares y así evitar extorsiones, chantajes y estafas por parte de desaprensivos. Exhortó a la ciudadanía a prevenir sobre estos delitos.
CAUTELA
Investigar.
La Policía pidió a los afectados para que cuando eso ocurra acudan de inmediato a los organismos correspondientes para investigar y dar seguimiento.
Más comunes.
La forma más común de delitos cibernéticos es a través de correos fraudulentos conocidos como phishing. Este fraude informático consiste en enviar un correo electrónico falso a un usuario simulando ser una entidad legítima.