El cadáver de Álida Margó Lagares Nelson fue encontrado con signos de violencia en la cara y el cuello en una cisterna de una residencia del referido habitacional, donde vivía con su pareja, el español, David Toribio Vives.
Mientras crece el temor entre familiares de la fenecida de que el hombre haya escapado a su país por algún aeropuerto de República Dominicana.
La Policía ha hecho rastreos en zonas de Cabarete, Sosúa y otros pueblos de la Costa Norte, incluso los rastreos se han extendido a Santiago, según fuentes policiales.
La muerte de la mujer ha causado conmoción en Cabarete y personas piden a la Policía Nacional y el Ministerio Público que profundicen las investigaciones para que ubiquen el paradero de Toribio Vives.
Investigadores policiales contaron que el ciudadano español hizo un drama, que lloró “desconsoladamente” y que pedía que ayudaran a la localización de la joven.
Incluso, fuentes policiales en Sosúa y Cabarete sostienen que el extranjero se sumó a la búsqueda de la joven, pero que luego desapareció misteriosamente.
El cadáver de la muchacha fue encontrado cuatro días después de su desaparición en una cisterna de una residencia del habitacional Perla Marina, de Cabarete, de Puerto Plata.
El médico que examinó el cadáver certificó que presenta signos de violencia en el cuello y la cara.
La madre de la víctima dijo que el martes a las 2:00 de la madrugada acompañó a su hija hasta la puerta del residencial Perla Marina de Cabarete, se la entregó a un guardián privado hasta llevarla a la residencia del español y que de ahí en adelante no supo más de ella. La mujer dejó en la orfandad un niño de seis meses que había procreado con el extranjero.
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