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Altagracia Kubinyi
Hoy Noticias.Falls Church, Virginia.En algún episodio de nuestra vida hemos tenido espacio para poder analizar las palabras desesperadas de un niño o niña que, obligado y obligada por sus condiciones deplorables en la que vive, se ve empujado/a a querer tener su primer empleo para poder salir adelante. Desde muy pequeña he presenciado ese horizonte, nublado e injusto.
Así sangra mi Patria a través de esas inocentes criaturas que no tienen la culpa de las decisiones de los mayores.
Es a cada uno de ellos y ellas que se les quita la oportunidad de soñar cuando una persona desde la administración pública y privada hace una mala jugada. Es a esa población a la que se le niega la oportunidad de respirar aire puro durante las negociaciones irresponsables de los recursos naturales.
Ellos y ellas, que están llamados a vivir su etapa de niñez sin la preocupación de trabajar, son los que más torturas reciben de nuestros gobernantes y sus dolorosas medidas. Lamentablemente les persigue la sombra de la pobreza económica y, en muchas ocasiones, la espiritual.
Hablo por los niños y niñas que tienen que sufrir a diario el incontrolable comportamiento de una sociedad que los rechaza. Esos infantes que en busca de su primer “trabajo “para un mejor porvenir son reclutados y obligados por sus verdugos a robar, atracar y delinquir. En las niñas es similar. Son sometidas a tener relaciones sexuales y así se convierten en adolescentes dolidas y maltratadas.
Ningunos pidieron venir al mundo, pero todas y todos nacieron con el derecho idealizar el mundo que quieren.
Considero que es momento de que la juventud piense antes de tener a sus hijos e hijas y los que son padres brinden un ambiente sano.
El Estado y sus integrantes deben de cumplir con su obligación de generar una atmósfera de confianza y respeto a cada infante y adolescente.
Ellos y ellas son la Patria, son el presente y el futuro. Les dejo con la frase del destacado dramaturgo de Londres, Oscar Wilde: “la mejor forma de hacer buenos a los niños es hacerlos felices”.
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